El misterio de las cabras y las ovejas — J. Cannon

Verano de 1976. La señora Creasy se ha esfumado sin dejar rastro. Su marido, perplejo y desesperado, revuelve sus cosas tratando de encontrar alguna pista, mientras los vecinos echan la culpa a la ola de calor de haber alterado a esa mujer afable y generosa aunque propensa a sonsacar los pecadillos a los demás.

Cuando la policía la declara oficialmente desaparecida e inicia la investigación en La Avenida, la pequeña Grace, de diez años, decide aportar su grano de arena y emprende sus propias pesquisas con la ayuda incondicional de su mejor amiga Tilly.

Juntas van de casa en casa interrogando subrepticiamente a los residentes. Pero a medida que las puertas y las bocas van abriéndose, esa avenida empieza a revelar sus más oscuros secretos y pronto las detectives aficionadas descubrirán más de lo que habrían sospechado.

Empezaré esta reseña diciendo que (por suerte) no pagué nada por este libro, ya que lo conseguí en Edición Anticipada. Por este motivo, estuve tentada a dar mejores opiniones de las que en verdad tengo, o al menos maquillarlas un poquillo, pero no lo voy a hacer porque no me da la gana.

Dicho eso, y sin querer ofender a nadie, quisiera comentar algo que me parece horrible que se haga: decir que un libro (o autor) es el siguiente "NombreDeLibroSuperventas". Sé que se hace para dar una referencia de lo que se va a leer, pero le hacen un flaco favor al libro que se presenta y al libro superventas, y también a los lectores. Nadie quiere ser el siguiente de nadie. Más que nada porque las comparaciones son odiosas y, si te presentas como la siguiente Danielle Steel por haber escrito solamente un libro famoso... pues aplaudo tu moral, pero qué fuerte será tu caída cuando irremediablemente caigas a la realidad. Y eso es lo que le pasa a El misterio de las cabras y las ovejas; que al compararlo con otros libros, queda descolorido e insulso.

Vale, voy por partes. Las protagonistas de esta historia son unas nenas de diez años que aprovechan la oportunidad de ser "invisibles" para los adultos para prestar atención a todo lo que se habla y a las respuestas que van escuchando por ahí. Sacan sus propias conclusiones y, como se dice coloquialmente, empiezan a tirar del hilo para intentar averiguar dónde está la señora desaparecida.

Se toca siempre el tema de Dios, la Iglesia y su doctrina. Las chicas quieren encontrar a Dios porque se les dice que Dios está en todos lados, y ellas piensan que si eso es verdad, entonces Dios sabrá dónde se encuentra la señora Creasy... y misterio resuelto. No es malo que se entre en este tema desde el punto de vista de las niñas y de la época, así que no estoy juzgando. De hecho, que se hable del tema aquí y allá, da pie a unas bonitas reflexiones que aplaudo 😊.

Lo que no me gustó de este libro es que es bastante lento en la trama y que hay demasiados personajes muy mezclados (y a todos se los refiere como señor/señora Apellido), con lo cual se tiende a confundir unos con otros hasta bien llegada la mitad de la obra. A algunos giros de la trama los vi venir, a otros no; pero de todas formas no es un libro que me haya enganchado lo suficiente como para terminármelo en un par de días. He tardado mi mes (más o menos) en terminarlo porque lo he dejado abandonado durante días...

No sé si ha sido el hecho de leer la historia desde el punto de vista de las nenas, o por la lentitud de las acciones y descubrimientos, o quizá por las comparaciones con otros libros de temática similar que son mucho mejores, o por todas las razones juntas. Me ha dejado bastante indiferente, la verdad, así es que a esta obra no puedo ponerle más de: