Flores en el ático — V. C. Andrews

Desde su publicación original, Flores en el ático se convirtió en un fulminante best seller y fue adaptada al cine con gran éxito. Primera entrega de una serie sobrecogedora, esta novela narra la terrible experiencia vivida por cuatro niños que, víctimas inocentes de unas pasiones prohibidas, crecen en un lúgubre encierro, aislados del mundo por una madre cruel...

La apasionante saga de la familia Dollanganger incluye también los títulos Pétalos al viento, Si hubiera espinas, Semillas del ayer y Jardín sombrío.

Voy a pasar directamente a mi opinión porque estoy que no puedo más:

Vale, estamos en el principio de una historia de lo más bonita. Son todos guapos. Todos respetados. Todos felices. Hasta nos enteramos de que la familia se va a agrandar y estamos todos alegres (después de coger un berrinche).

«... aunque estuviera lloviendo o nevando, el sol parecía brillar de nuevo en cuanto él nos dedicaba su gran sonrisa feliz.»

Estamos hablando de lo que hacía el padre de la familia. Lo que sentían ellos cuando él llegaba. Cuando todo era todavía perfecto. Sin embargo, ocurre algo que hace que la madre tenga que volver al sitio del que salió antes de casarse: a la casa de sus padres. De sus millonarios padres. De sus millonarios padres malvados.

En mi opinión, la cosa no va mal ni aburrida hasta que llegamos al... hmm... digamos el 30 % de la lectura. De hecho creo que este primer tercio me lo leí del tirón, pero luego la cosa se desinfla más rápido que un globo pinchado por mil agujas a la vez.

Creo que no spoileo nada al decir que los cuatro niños (dos de ellos ya adolescentes) son encerrados, en teoría solamente de forma temporal, por su propia madre y abuela en el ático de una mansión digna de reyes.

«¿Creía de verdad que el amor, una vez conseguido, ya no puede ser deshecho por dudas y temores...?»

Pues la madre al principio sigue jugando con ellos, pero poco a poco se deja influenciar por las riquezas y facilidades que le ofrece la vida de esplendor que llevan sus padres. Los días, semanas y meses pasan; los niños siguen ahí dentro sin posibilidad de salir. Sufren frío, calor, aburrimiento... Hablando de aburrimiento, el lector también se aburre a la par que pasan las páginas y NADA nuevo ocurre.

La abuela es una fervorosa de la religión y no le perdona un error imperdonable a su hija. Detesta a sus nietos. Los humilla y maltrata cada vez que se le da la gana. Con maltratos físicos y psicológicos por igual.

Vemos cómo los niños (ya no tan niños, por cierto) siguen comportándose como tontos sin rebelarse ante nada. Los dos mayores creo recordar que tienen 16-17 y 14-15 años. Ya tienen desarrollada una personalidad. Y son fuertes y sanos. Si este libro fuera creíble, habrían escapado mucho antes de lo que lo hicieron... sí, ahí va otro spoiler. Que pillé de la peli, porque no fui capaz de terminar de leer este bodrio. (No) Lo siento.

En una parte (esto sí que lo leí), se escapan para ir a nadar al lago. Y luego vuelven. Podrían haberlo hecho antes y huir. Buscar refugio en cualquier sitio. Robar un caballo o coche. Pedir ayuda a cualquiera. Desenmascarar a su madre y abuela ante la sociedad. Si fueran niñitos de diez u once años, lo entendería. Pero ya son grandotes para tal comportamiento.

No me gustó nada y ojalá nadie se lo recomiende a una persona que comienza su andadura en la lectura, porque odiará los libros... aunque sea un clásico.